Un helicóptero turístico operado por Papillon Grand Canyon Tours, en el que viajaban siete personas, incluido el piloto, se estrelló al intentar un aterrizaje cerca del borde oeste del Gran Cañón el 10 de febrero de 2018. Tres de los ocupantes turísticos murieron en el lugar de los hechos. Cuatro, incluido el piloto, sobrevivieron al accidente y fueron trasladados al UMC, donde fueron clasificados en estado crítico. Desde entonces, dos de los cuatro supervivientes murieron, dejando solo al piloto y a otro pasajero como supervivientes.
Los seis pasajeros eran turistas británicos, dos de los cuales estaban celebrando su luna de miel con cuatro amigos. Se cree que el helicóptero, un Airbus Eurocopter EC130, tenía problemas con el rotor de cola en el momento del accidente. Los testigos relataron que el helicóptero dio dos vueltas de 360 grados mientras descendía. Se cree que los fuertes vientos fueron un factor que contribuyó al accidente.
Cuando se produce un acontecimiento trágico como éste, nuestros corazones están con las víctimas y sus familias supervivientes durante este tiempo de luto.
Investigación del suceso de la colisión
La Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB) dirigirá la investigación sobre la causa del accidente, y los resultados finales no se esperan hasta dentro de nueve meses o un año. En el momento de redactar este informe no se ha establecido la causa oficial del accidente.
Desde 1994, la Administración Federal de Aviación (FAA) ha exigido que los nuevos modelos de helicópteros certificados vengan equipados con un sistema de combustible resistente a los choques, sin embargo, este modelo de helicóptero está cubierto por un certificado emitido en 1977 y no estaba equipado con el sistema de combustible más seguro. Aunque el sistema resistente a los choques no garantiza que no se produzca un incendio después del choque, puede ofrecer una ventana de escape a los supervivientes.
¿Quién es responsable?
Quedan muchos interrogantes sobre este trágico suceso. Es probable que la responsabilidad no se establezca definitivamente hasta que se complete el informe de la NTSB.
Ciertamente, el operador de la aeronave será sometido a un minucioso escrutinio. ¿Tenía el piloto la experiencia suficiente para operar esta aeronave en las condiciones existentes? ¿Debería haber operado esta aeronave en las condiciones meteorológicas existentes? ¿Se inspeccionó la aeronave de acuerdo con los requisitos del fabricante y de la FAA? ¿Se siguieron los programas de mantenimiento del fabricante? ¿Funcionaba el rotor de cola de forma defectuosa, lo que contribuyó al accidente? ¿Se anotó un problema del rotor de cola en los registros de mantenimiento de esta aeronave?
¿Utilizó el operador de la aeronave a subcontratistas para prestar servicios de mantenimiento, y estaban éstos cualificados para prestar dichos servicios? ¿El personal de mantenimiento del operador o los subcontratistas estaban al día en sus certificaciones y habían recibido la formación necesaria para realizar el mantenimiento adecuado de esta aeronave?
Además, el fabricante de la aeronave puede tener responsabilidad si se puede demostrar que un factor que contribuyó al accidente fue un problema conocido que puede o no haber sido cubierto en los avisos de seguridad del fabricante o en las retiradas de productos del operador. ¿Había una retirada del fabricante que pudiera haber evitado el comportamiento experimentado por esta aeronave que contribuyó al accidente? ¿Han experimentado otras aeronaves de este tipo de modelo problemas similares en condiciones meteorológicas parecidas, y se ha documentado y difundido este comportamiento a los operadores de la aeronave? ¿Había alguna pieza de la aeronave defectuosa?
Una vez emitido el informe de la NTSB, el litigio responderá a estas y otras muchas cuestiones legales para establecer la posible responsabilidad del operador, de cualquier subcontratista y del fabricante de la aeronave, o de los fabricantes de piezas para la misma. Se trata de un proceso complejo y largo que requiere las habilidades de un abogado bien formado y con experiencia que defienda tenazmente los derechos de las víctimas para obtener un acuerdo justo.
El bufete de abogados Richard Harris representa a las víctimas de accidentes de aviación
Los accidentes de aviación no son sucesos comunes, pero suelen terminar con resultados devastadores. El bufete de abogados Richard Harris tiene experiencia en esta área de la ley y ha litigado con éxito acuerdos para las víctimas y las familias sobrevivientes en eventos anteriores. Estamos listos para representar a aquellos que han experimentado accidentes de aviación. Si usted o un miembro de su familia ha sufrido un accidente de aviación, llame a nuestro bufete hoy para discutir su posible caso, al (702) 444-4444.
Más información:
http://news3lv.com/news/local/fifth-person-dies-from-injures-two-weeks-after-tour-helicopter-flight
http://www.lasvegasnow.com/news/fifth-person-dies-following-grand-canyon-helicopter-crash/992578557
https://www.ktnv.com/news/4-survivors-of-arizona-helicopter-crash-still-critical_93350159
