Las lesiones relacionadas con productos pueden causar complicaciones debilitantes, perturbar la vida cotidiana y causar un grave daño emocional a las familias. El sistema jurídico establece normas claras para ayudar a las víctimas de los defectos de los productos a obtener una indemnización y pedir cuentas a los responsables de sus lesiones. Ganar un caso de lesiones personales es factible en muchas situaciones porque las víctimas no necesitan normalmente demostrar la negligencia del fabricante para recibir una indemnización en los tribunales. Las víctimas sólo tienen que demostrar que la lesión fue causada directamente por un producto defectuoso. Por lo tanto, las personas lesionadas como resultado del uso de un producto deben evaluar la amplia gama de situaciones en las que los tribunales pueden ofrecer una compensación por el sufrimiento indebido y las pérdidas financieras.

1. Gastos médicos

Los costes asociados a las lesiones causadas por los productos pueden suponer una carga agobiante para la economía familiar. Dependiendo de la lesión, los costes pueden oscilar entre miles de dólares y gastos astronómicos que obligan a tomar medidas drásticas. Los elevados costes también son relevantes para las víctimas con seguro, ya que las primas suelen aumentar tras un accidente. Las víctimas de lesiones relacionadas con productos deben asegurarse de guardar todos los recibos, presupuestos y documentación del seguro como prueba de los gastos incurridos. El total de los gastos médicos que paga una víctima y su proveedor de seguros suele poder reclamarse en su totalidad cuando se puede demostrar que los productos defectuosos son la causa de una lesión.

2. Pérdida de ingresos

El coste total de una lesión incluye no sólo los gastos de salida que se pagaron, sino también los ingresos que se perdieron mientras se recuperaba. Los tribunales permiten a las víctimas recibir una indemnización por el importe total de los ingresos perdidos, y esto puede incluir mucho más que los días de baja laboral. Las lesiones pueden causar complicaciones a largo plazo que reduzcan el rendimiento laboral y el potencial profesional futuro. Dado que las víctimas pueden reclamar pérdidas de ingresos indirectas, es esencial tener en cuenta toda la gama de pérdidas que pueden reclamarse legalmente para obtener la máxima indemnización. Tener en cuenta la pérdida de ingresos puede ayudar a las víctimas a recuperar más de lo que realmente han perdido tras una lesión.

3. Dolor y sufrimiento

Los daños en la vida de una víctima asociados a una lesión van mucho más allá de las simples pérdidas económicas. El dolor puede ser intenso y dejar a las personas con un trauma de por vida por el horrible recuerdo de la agonía extrema. Los individuos también pueden experimentar un dolor que nunca desaparece del todo o que vuelve periódicamente. Los tribunales han establecido normas claras que permiten a los individuos recuperar los daños por el dolor y el sufrimiento cuando sus lesiones fueron causadas por un producto defectuoso. Es posible que la indemnización económica no haga desaparecer el dolor, pero puede ayudar a aliviar la carga general impuesta a los individuos que sufren innecesariamente con graves molestias.

4. Desfiguración

A veces, los daños de una lesión nunca pueden curarse del todo. Además, algunas lesiones pueden arreglarse, pero pueden requerir extensos procedimientos cosméticos que conllevan costes astronómicos que a menudo son difíciles de cubrir por un plan de seguro médico. Por ello, los tribunales permiten a las víctimas recibir una indemnización por desfiguración, que se define como el daño estético a largo plazo asociado a una lesión. Las víctimas pueden reclamar el coste total de la cirugía estética y las pérdidas asociadas al daño a la apariencia personal. La desfiguración puede ser embarazosa e interferir en la capacidad de una persona para llevar una vida normal. Las personas que quedan desfiguradas como resultado de una lesión relacionada con un producto deben utilizar el sistema legal en su beneficio para ayudar a recuperar su vida anterior.

5. Discapacidades

Las discapacidades son una repercusión común de las lesiones causadas por productos, y varían ampliamente desde trastornos moderados hasta complicaciones debilitantes. Las discapacidades menores pueden incluir espasmos, marcha irregular y pérdida de sensibilidad localizada. Sin embargo, incluso cuando las discapacidades se perciben como tolerables, los fabricantes pueden ser considerados responsables ante los tribunales. Y lo que es más importante, los tribunales pueden ofrecer indemnizaciones por discapacidades crónicas que hacen imposible la vida ordinaria y ponen en peligro las posibilidades de supervivencia de una persona. Las víctimas que ganan una demanda por discapacidad a menudo pueden ganar tanto daños compensatorios como punitivos, por lo que las personas discapacitadas deben asegurarse de hablar con un abogado profesional para evaluar sus posibilidades de éxito en una demanda por discapacidad.

6. Angustia mental

El sufrimiento total causado por una lesión causada por un producto defectuoso puede incluir mucho más que un traumatismo físico. El impacto psicológico de una lesión puede ser a menudo devastador y afectar a la capacidad del individuo para disfrutar o participar en la vida diaria. Las víctimas pueden ir por la vida con ansiedad extrema, depresión o trastornos de la personalidad. Por desgracia, la angustia mental puede interferir en las relaciones de la víctima con otras personas, incluidos los miembros de la familia, los colegas y los amigos íntimos. Cuando los efectos de la angustia mental pueden documentarse, los tribunales permiten a las víctimas recibir una compensación económica por las dificultades mentales. Conseguir una indemnización por angustia mental puede ayudar a las víctimas a obtener los medios económicos necesarios para afrontar eficazmente el sufrimiento mental tras un accidente.

7. Pérdida del consorcio

Las propias víctimas no suelen ser las únicas personas perjudicadas por una lesión relacionada con un producto. Los miembros de la familia y los cónyuges también pueden sufrir trastornos en sus vidas que suponen una carga económica y emocional. Los cónyuges pueden tener que ausentarse del trabajo para cuidar de un ser querido, y los hijos pueden tener que renunciar a actividades extraescolares para cuidar de un padre o abuelo lesionado. Los seres queridos también pueden tener que lidiar con el dolor psicológico asociado a ver a un ser querido cercano experimentar un dolor agudo o angustia mental. Por lo tanto, el sistema legal permite a los familiares cercanos de la víctima y a su cónyuge reclamar daños y perjuicios a un fabricante responsable después de que un ser querido haya sido lesionado injustamente por un producto defectuoso.

Reclamación de indemnización

Las víctimas de productos defectuosos deben saber que existen recursos legales asequibles para ayudar a aliviar los costes financieros y emocionales de las lesiones innecesarias. Además, las personas que persiguen a los fabricantes culpables en los tribunales también hacen un bien a los demás, ya que contribuyen a aumentar el incentivo para que los futuros productos se diseñen de forma segura y ética. Trabajar con un abogado experimentado puede ayudar a aumentar las posibilidades de ganar una demanda, y ayudar a las víctimas a determinar qué opciones legales son las más apropiadas para su situación particular. Reclamar una indemnización puede ayudar a poner a las víctimas en el camino de la recuperación, y ayudarles a volver a vivir una vida mejor.

Si usted ha sido lesionado por un producto defectuoso, llame al bufete de abogados Richard Harris para una consulta al 702-444-4444.